En un contexto de crisis múltiples, el informe denuncia la marginación de la cultura en las políticas públicas y propone una visión transformadora.
En un mundo marcado por crisis múltiples y una creciente desconfianza en las instituciones, la cultura sigue siendo uno de los pilares más ignorados pero esenciales para imaginar futuros sostenibles, inclusivos y democráticos. El informe State of Culture de Culture Action Europe plantea una reflexión profunda: ¿por qué la cultura, pese a su capacidad transformadora, sigue al margen de las decisiones políticas? Y más importante aún, ¿cómo podemos cambiar esto?
¿Qué está en juego?
- La cultura está siendo instrumentalizada para fines externos (económicos, sociales, climáticos), perdiendo su valor intrínseco.
- Hay una desconexión entre cómo los políticos valoran la cultura y cómo el sector cultural se ve a sí mismo: como agente de cambio, diversidad y democracia.
- La libertad artística está amenazada por la polarización, la precariedad y la autocensura.
- La inteligencia artificial y la crisis climática exigen una nueva mirada sobre la creatividad y el papel de la cultura en el futuro.
¿Qué propone Culture Action Europe?
- Reivindicar la cultura como un campo autónomo, con políticas que reconozcan su valor propio.
- Apostar por una cultura democrática, diversa y cuidadora.
- Incluir la cultura como objetivo clave en las agendas europeas y globales de sostenibilidad y democracia.
- Construir una nueva estrategia basada en dos principios: el cuidado (care) y el más allá (beyond), pensando en futuros colectivos.
"Una política cultural del siglo XXI es posible, pero requiere valentía y convicción."
– Culture Action Europe
Este informe no es el final, sino el inicio de una conversación imprescindible sobre el futuro de la cultura en Europa.
Visita: https://cultureactioneurope.org/es/projects/state-of-culture/